Finaliza la primera temporada del Campeonato Mundial de Resistencia (WEC) con algo que se veía venir desde su principio. Audi conquista el titulo en el primer año de esta competición creada por la ACO y la FIA, aunque no sin dificultades.
Al Audi e-tron nº 1, conducido por André Lotteler, Marcël Fassler y Benoît Tréluyer, le bastó con llegar tercero a meta por detrás del Toyota de Alex Wurz y Nicolas Lapierre y del Audi nº 2 de los veteranos Tom Kristensen y Allan McNish, para conseguir el titulo en la categoría LMP1 que les consagra como los reyes de la Resistencia.
Por su parte Toyota cierra esta temporada de debut con buenas sensaciones al firmar en China su tercera victoria de la temporada algo que tiene mérito al llegar a mitad de año a la competición y con poco rodaje a sus espaldas.
En las otras categorías, los ganadores fueron John Martin, Tor Graves y Mathias Beche con un Oreca-Nissan en LMP2; y Stefan Mücke y Darren Turner con un Aston Martin Vantage V8 en LMGTE Pro.
En clasificación general, Rebellion Racing se proclama campeón de la temporada en categoria LMP2 y Ferrari se hace con el título de constructores en las categorias de GT.
Como balance final de este primer año de competición cabe decir que con las últimas victorias de Toyota, lo que parecía a priori un paseo de Audi tras la marcha de su gran rival, Peugeot, de la Resistencia ha resultado ser una digna competición entre dos grandes marcas automovilísticas.
Esperemos que la temporada que viene, con Toyota ya asentada, el equipo nipón esté al nivel de los alemanes para disputarles el título mundial y por supuesto tratar de alcanzar la gloria de ganar las 24h de LeMans; una asignatura pendiente que les persigue desde su inicio y posterior retirada a finales de los 90 con aquel proyecto GT-one.
